Nadie es profeta en su tierra. Ayer estuvimos, como FBCV, dando el apoyo del billar valenciano, al Centro Excursionista Eldense-C.E.E.; recibió el más alto galardón que puede ofrecer la ciudad, la Medalla de Oro de Elda, si, la FBCV tuvo el privilegio de “estar” y asistir.
Reconocimiento que ya tenía “de facto” de “su tierra”; de “su gente” desde ya hace mucho tiempo. Así, ayer el acto supuso el reconocimiento oficial. Una victoria rotunda y absoluta de la “sociedad civil” que debiera servirnos de ejemplo permanente. Finalmente decimos que el C.E.E., desde 1957, ha conseguido mucho, muchísimo y además lo más difícil SER PROFETA EN SU TIERRA . .